Mitos y verdades relacionados con los agronegocios
Antes que nada, hago recordar a los incrédulos, ya sea por desconocimiento o por mala intención, que el agronegocio es el sector o la combinación de sectores y subsectores más importante del país, mueve el 45 % de la economía en términos de PIB, el 70 % del total de exportaciones, la mayor parte del empleo pleno se genera en esta instancia, provee alimentos para muchos, materia prima para las industrias y genera un balance positivo en términos de externalidades (positivas – negativas) que nadie puede poner en duda. Por otro lado, nada puede remplazar a este importante sector conceptualizado en su real y amplia dimensión.
El futuro del país no va a encontrar suficientes posibilidades de desarrollo, como muchos pretenden utópica e ilusionariamente, en sectores tales como la minería, puesto que Paraguay no cuenta con materiales, por lo menos visibles, como es el litio, el diamante, el oro, el petróleo, el gas, etc. Otro país de la región lo dispone, tampoco nos salvará, aunque podrán complementar a los agronegocios, el ensamble de vehículos, la maquila, la energía eléctrica generada, los servicios intangibles, etc.
Otros países, con mayor capitalización y desarrollo como Argentina y Brasil, asimismo basan su economía en los agronegocios.
No es fácil comprender el hecho que este fenomenal sector no logra instalarse positivamente en la mente de los decidores políticos, en el pueblo y en la sociedad civil en general. Pareciera que el pensamiento urbano, keynesiano y sus acciones, invadieron nuestro “modo operandi” en desmedro y desprecio al sector más importante de nuestra realidad y que mueve nuestra economía. Todos, sean ellos académicos, comunicadores, funcionarios públicos de alto, mediano o bajo rango, manifiestan permanentemente su preocupación de fuerte contenido urbano, interesa más los baches de la calle, la costanera, la ciclo vía, la tarifa de pasaje, la seguridad urbana, los viaductos, el tren de corta distancia, entre otros y pareciera que no importa y que no se prioriza el verdadero motor que mueve nuestra economía, es decir los agronegocios.
¿Qué es más importante y más sostenible, para la economía del país, un tren de pasajeros de corta distancia o un tren de carga de productos?, sin duda, es esta inversión que nos hará más competitivos. ¿Qué es más importante, concentrarnos en los baches urbanos o en las rutas de todo tiempo para que los productores puedan sacar sus productos en forma y en tiempo? ¿Es más importante la electricidad que brinda el monopolio estatal de la ANDE (Que dicho de paso es una vergüenza nacional que en pleno siglo actual tengamos que ser manejados por un ente monopólico, la energía eléctrica es un tema crucial para el desarrollo de nuestro país) con apagones intermitentes para el sector productivo rural con enormes pérdidas, priorizando los aires acondicionados urbanos y no la producción que sostiene al país?
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Mitos y verdades relacionados con los agronegocios